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Favores Familia Etxeberria

Nuestra pequeña S.E.G. comenzó a tener problemas de salud cuando contaba con sólo 12 días de vida debido a una bronquiolitis que exigió su paso por la U.C.I.P (Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos) del Hospital de Basurto.

Cinco días después del alta le ingresan con gastroenteritis y se le desarrolla una meningitis linfática y "abdomen quirúrgico". Como no tienen servicio de cirugía pediátrica en Basurto le trasladan a Cruces, en donde, después de unos días de observación, deciden operarla, comprobando que sufría de peritonitis.

Dos días después observan que a la niña le están dando trombos. Diagnóstico: vasculitis, en la modalidad de Kawasaki, de extremísima gravedad, y con una frecuencia de 1 por millón en el mundo.

Tratamiento extremos para mantenerla viva, con 48h en peligro de muerte, que la niña superó.

Tras 6 meses de tratamiento el parte médico le detecta una isquemia intestinal (lo que exige ponerle una bolsa) así como trombos distales (en los piés) y dedos de la mano.

Nos recomiendan que no nos alejemos de nuestro domicilio y que, a los menores síntomas de preocupación, vayamos a Urgencias de Cruces.

La ileostomía no le fue bien a la niña y tuvimos que acudir varias veces a Urgencias, porque tenía problemas que le originaban dolores terribles.

Semanas más tarde, ingresa otra vez, esta vez con un prolapso que se le repitió varias veces; una de ellas le originó una invaginación, por lo que es de nuevo operada "a vida o muerte", que de nuevo lo supera la niña.

Posteriormente, y ya que parece que responde bien al tratamiento contra la vasculitis, deciden quitarle la bolsa, pero fue mal, estuvo mes y medio de nuevo ingresada con estenosis y le volvieron a poner otra bolsa, que no funcionó bien y provocó varios ingresos más en Urgencias.

Por fín, la 6ª intervención, para curar la estenosis fue mejor de lo esperado y le quitaron también la bolsa.

Todo este proceso ha estado acompañado de continuas oraciones y peticiones al Siervo de Dios, José María Arizmendiarrieta, ya que estábamos convencidos de que "un santo de nuestra tierra" nos iba a ayudar con S., por lo que hemos estado tan preocupados por su vida.

Hoy a la niña se le ve contenta y alegre y está haciendo vida normal para una niña de 18 meses, recuperando el tiempo perdido en su desarrollo por sus continuas convalecencias.

No tiene aún el alta médica, pero su situación actual es extraordinaria para nosotros. No sabemos si tendrá más problemas en el futuro pero seguiremos rezando a Arizmendiarrieta, al que ya le estamos enormemente agradecidos, para que nos siga ayudando con su intercesión.

 

Familia de S.E.G. 

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